miércoles, 4 de mayo de 2016

Ojalá pudieses leer esto.

Supongo que alguna vez te habrá pasado eso de querer tanto a alguien que te da igual que no esté contigo mientras esté bien.
La verdad es que no sé por qué te quise tanto, no sé qué hiciste, no qué se me metió en la cabeza, pero, aunque ya no sienta lo mismo de antes, se me hace un nudo el corazón si me acuerdo de tu voz.
Eras buena persona. Y yo siempre pensando que eras tan malo e intentando justificarme con ello... Pero supongo que fue mi manera de soportar el dolor.
A lo mejor ni siquiera debería estar escribiendo esto, ya ha pasado mucho tiempo. Pero es que yo no puedo olvidarte. 
Y no me malinterpretes, no lloro por ti, no sufro, no tengo ganas de hablarte ni de que reaparezcas en mi vida. (O tal vez sí, aunque querer no significa necesitar) 
Pero me acuerdo de ti. Me acuerdo de esa noche, bajo las estrellas, y me acuerdo de tu tranquilidad. Recuerdo que cuando me cogiste de la mano, y yo bajé la cabeza para ver nuestras manos entrelazadas, me sentí por primera vez en paz. En toda mi vida. Eso puedo jurarlo. Y esos sentimientos a veces quieren volver, y se acuerdan de ti... pero no, no es correcto. 
Y podría seguir escribiendo, pero no es necesario cuando te lo puedo decir todo de otra manera.




1 comentario: